
Hola. Estás en un blog multitemático. Morgana, José Luis y el Abuelo Cocinillas esperan que te lo pases bien aquí. Y recuerda... PON EL CEREBRO EN FUNCIONAMIENTO ANTES DE PONER LA LENGUA EN MOVIMIENTO
LOS QUE HACEMOS DE ESTE BLOG UNA CASA DE LOCOS
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MORGANA | JOTAELE | AGÜELO COCINILLAS |
Oficialmente, profesora Escritora Casada y madre de familia Me gusta leer, escribir y el rock and roll Toco la guitarra Hago dameros Me gusta Patán Odio la política y los programas del corazón | Oficialmente, abogado Seductor No sabe, no contesta Me gustan las mujeres Toco lo que me dejan Hago el amor Me gusta Betty Boop Odio a Belén Esteban y a María Antonia Iglesias | Oficialmente, jubilado Naturalista Viudito y disponible Me gusta observar la naturaleza humana Ya no toco nada Hago disecciones Me gusta doña Urraca Odio la caza, la pesca y los toros. |
PARA DESCARGAR MIS LIBROS
jueves, 30 de diciembre de 2010
AÑO NUEVO, LIBROS VIEJOS

martes, 21 de diciembre de 2010
BOBBY FARREL, IN MEMORIAM

lunes, 20 de diciembre de 2010
KEITH RICHARDS: "VIDA"

ABURRIDO *
viernes, 10 de diciembre de 2010
EL IPHONE CHINO, O CHIPHONE


lunes, 29 de noviembre de 2010
OBLIGACIÓN VERSUS PROHIBICIÓN

lunes, 22 de noviembre de 2010
MIGUEL RÍOS: COLISEO DE A CORUÑA. 20-11-2010****


viernes, 19 de noviembre de 2010
LO PROHIBIDO
Me estreno en este blog. Mi compañera de página me ha invitado a hacerlo. No podía rechazar la invitación, que se produjo de la siguiente manera: estábamos en nuestra pequeña redacción ella, el viejo sordo que usa trompetilla, duerme eternas siestas y tira ventosidades sin cortarse un pelo, y yo. Entonces ella me dijo: “ya estás publicando algo o te echo a patadas en el culo”. Ante tan exquisita sugerencia, no me queda más remedio que ponerme a ello. Y créanme que no tengo mucho tiempo. Esta mañana, sin ir más lejos, estuve ocupadísimo entre la lectura de mi correo, un par de horas en facebook jugando al tesoro y tres horas de chat en el Messenger con mi amigo Carlos Losada, que tenía la desfachatez de discutirme quién de los dos había sido el primero en gozar de las delicias de Pavita González allá por nuestro primero de BUP. Por supuesto, fui yo; pero me costó hacérselo entender. Qué flaca se vuelve la memoria a partir de los cuarenta.
He aquí que mi compañera de blog se ha tomado la libertad de lanzarme un reto para hablar sobre cierto tema. No voy a hacerlo. No voy a hacerlo porque apenas si tengo conocimientos sobre ello; y yo de lo que no sé, no hablo. Pero sí usaré el texto como pretexto para explayarme sobre una idea que he desarrollado a partir de lo que cierta encantadora dama dijo en los comentarios.
En mi juventud la masturbación era pecado. Desde que a uno le empezaba a cambiar la voz y a salirle pelusilla en el bigote y en otras partes del cuerpo, ya empezaba a escuchar la misma cantinela: se volvía uno loco, te quedabas ciego, tullido, cojitranco, impotente, estéril y cejijunto… en fin. ¿Qué les voy a contar que no sepan ya? Los tiempos han cambiado mucho y hoy en día ya no sólo no es pecado, tampoco es delito punible. Usted se la puede cascar en la calle tranquilamente a plena luz del día que, como mucho, pasará un rato en el cuartelillo. Por supuesto, libertad para manejar el propio cuerpo, como no podría ser menos en una sociedad democrática. El problema es que si no está prohibido dejará de ser divertido, al menos para mí.
Reflexiono sobre esta cuestión a tenor de algo que me dijo mi encantadora esposa el otro día. Llegó a casa enfadada, la niña le había montado un escándalo en la calle.
-Haberle dado un azote en el culo –sugerí yo.
Ella me miró como si hubiera dicho el mayor dislate de la historia.
-¿Algo te funciona mal por ahí arriba, José Luis? –por supuesto, ella sabe que por abajo todo funciona perfectamente –Ibamos por una calle llena de bancos.
Necesité treinta segundos para entender lo que quería decir con eso: bancos, ergo cajeros automáticos, ergo cámaras de seguridad.
-Hiciste bien, Roberta –respondí con admiración.
Y es que resulta que ahora los padres no podemos ejercer nuestra libertad como tales y dar un azote en el trasero a nuestros hijos en público nos puede suponer una denuncia anónima por malos tratos. Y si nos ponemos a pensar, tal y como hice yo ayer por la tarde, llegamos a la conclusión que en nuestra avanzada sociedad democrática todo está casi tan prohibido como en una dictadura. Todo. Uno puede cantar a voz en grito “El cara al sol” o “La internacional” y nadie se escandalizará ni será detenido por comportamiento subversivo. Y poco más. El resto está todo prohibido. Vivimos en una sociedad llena de carteles con imperativos y prohibiciones. Y eso me angustia y me genera unos deseos locos de tirar basura en la calle, conducir sin cinturón y hablando por el móvil, saludar a mis amigos con un sonoro bofetón si algún policía está pasando por delante en ese momento, ir en moto sin casco, e incluso, con el asco que me da, fumar.
Lo que más me repugna de este asunto es cómo meten mano salvajemente en unos temas y en otros tenemos que permitir un libertinaje propio de una república bananera: chicos haciendo botellón sin dejar dormir a nadie en toda la noche, a gritos, con la música a toda caña, dejando todo hecho un asco… ah, eso no, pobrecitos, se pueden traumatizar si se les quita la diversión. No hay manera de legislarlo, nadie le pone el cascabel al gato. Por no hablar de la pésima regulación de los contenidos de las televisiones emitidos en horario infantil: yo a Jorge Javier Vázquez lo mandaba a galeras y después lo hacía ahorcar y descuartizar por si las moscas. Y ya no me voy a meter en la notoria relajación de nuestro sistema judicial y penal, donde para conseguir una condena por asesinato de más de cinco años hay que cargarse a un edificio entero durante años con estricnina obtenida en casa para no entrar por una puerta de la comisaría y salir por la otra lustrándote las uñas en la solapa de la chaqueta y, probablemente, con un contrato jugoso para ir a ladrar tu experiencia en alguna patética televisión. ¡De vergüenza! Prohíben por un lado y dan caramelos y acceso franco por otro. Y me pone los pelos de punta, porque no quiero que mi hija se eduque en una sociedad así. Creo que mi actual tendencia hacia la monogamia y la fidelidad se debe precisamente a lo tolerante que es la sociedad con ese tema: no está prohibido, por lo tanto no me seduce.
Yo quería dedicar mi primera entrada de blog a mis rubias favoritas. Otro día será. Encantado de escribir para ustedes.
miércoles, 17 de noviembre de 2010
PLACERES SOLITARIOS
lunes, 8 de noviembre de 2010
LA SANTÍSIMA TRINIDAD
viernes, 29 de octubre de 2010
ASESINATO EN LA COCINA III

Cruzó la sala de embarque a grandes zancadas. Estaba nerviosísima. Odiaba volar con toda su alma, le daba terror. Y esta vez no era moco de pavo la cosa, nada más y nada menos que cruzar el charco… insufrible. Y sin poder fumar ni tener a nadie con quién hablar. Se tomaría un valium, a ver si había suerte y dormía todo el viaje.
-Pero, querida señora… qué alegría verla de nuevo –Una agradable voz masculina interrumpió sus negativos pensamientos. El ama se giró y se quedó mirando la figura del hombre que hablaba, que se le hacía ligeramente familiar, aunque no sabía muy bien de qué.
-Hola –dijo por todo saludo -¿Nos conocemos?
El desconocido, un hombre de unos cincuenta años y con pinta de representante, sonrió afablemente.
-Vaya… ¿No me reconoce usted? Eso me satisface, quiere decir que la dieta ha sido efectiva. Soy el Inspector Tilla.
El ama abrió la boca de puro asombro. ¡Claro que se le hacía familiar! Sólo que el bonachón Inspector Tilla había adelgazado unos quince kilos, se había quitado el bigote de morsa y, pensó el ama con regocijo, se había teñido el pelo canoso de un castaño casi negro que denunciaba el uso de la química en varias leguas a la redonda.
-¿Cómo no me voy a acordar de usted, si me salvó la vida? –El ama estrechó con calor la mano que el inspector le tendía –Lo que pasa es que no le reconocía. Esta usted fenomenal, inspector. Ha rejuvenecido diez años.
-Mi mujer me obligó a elegir entre ella o mi barriga –bromeó el inspector –La verdad es que me ha venido muy bien. Verá –continuó en tono confidencial –nos hemos comprado un par de máquinas de esas… tanto trabajar con ellas, todo se pega. Y me han venido muy bien para el régimen bajo en grasas. Por cierto, se me hace raro verla aquí sin las suyas…
-Voy a la Riviera Maya al certamen de Cocina Internacional con Máquinas –contestó el ama -Represento a España.
-Lo sé –repuso el inspector sonriendo –Adivine quién va de encargado de la seguridad.
-¿Usted? Qué alegría me da –aplaudió el ama –Aunque esta vez no va a pasar nada ¿verdad? Ya me llegó con la última –se estremeció recordando el momento en que casi había sido asesinada, el año anterior, por su propia motosierra.
-Claro que no, mujer –contestó Tilla dándole una palmada en el hombro –No se preocupe. Como mucho, intentarán robar alguna máquina o algo así. No tema, Macario sigue a buen recaudo entre rejas –se echó a reír –Tiene gracia, lo han puesto a trabajar en la cocina de la prisión, y eso que sólo tiene una mano… ¡Y sin máquinas!
-Que se fastidie –contestó el ama con dureza.
El inspector la cogió por el codo.
-Vamos, pongámonos a la cola para embarcar. A ver si hay suerte y nos podemos sentar juntos.
***
-¡Desde luego, mira que meternos en la bodega! Qué cosa más horrible, qué ignominia, me quejaré a la compañía aérea en cuanto aterricemos –protestó Chefo dentro de su bolsa.
-Sí, mujer… se van a morir de risa cuando vean que una panificadora se sube al mostrador a protestar porque no ha hecho el viaje en business class, no te joroba… -Thermo se rió de su propia respuesta. Acababa de terminar la maniobra de despegue. Suspiró pensando que le quedaban diez interminables horas escuchando las protestas de Chefo y decidió tomárselo con paciencia. G ya estaba durmiendo, como siempre, y la nueva no decía ni pío. Claro que aún no tenía mucha confianza con ellas.
-Chefo, piensa en algo agradable, como en las playas de Cancún –sugirió Thermo.
-Sí, playas que no vamos a pisar –dijo Chefo –Soy una máquina ¿Qué pinto yo en la playa? ¿Oxidarme?
-Lo pasaremos muy bien con el ama, mujer –insistió Thermo.
-¡Pero si el ama sólo está pensando en la maldita amiga esa con la que se va a encontrar! No nos hará ni caso, ya verás…
La verdad era que el ama estaba como loca pensando en el encuentro con su amiga Karen, la mexicana que había conocido por Internet. Además del certamen oficial, había otras categorías para otras máquinas y la amiga del ama concursaba en el apartado Crock-pot. Iban a estar quince días juntas en Cancún y el ama esperaba el encuentro verdaderamente emocionada.
-Fry ¿vas bien? –preguntó la thermo amablemente a la nueva adquisición, una freidora sin aceite de última generación.
-Sí, gracias –contestó la aludida con un tono poco convincente.
-No sé por qué te preocupas por ella –rugió Chefo. Como siempre, Chefo no podía evitar sentir celos por las máquinas nuevas que se incorporaban a su hogar. Ya aceptar a Ness le había costado lo suyo, y eso que lo único que sabía hacer era café –Preocúpate por mí, que lo estoy pasando fatal.
-Mira el lado bueno… no tendrás que aguantar al gato –Thermo seguía intentando ver el lado positivo del asunto.
-Eso también es verdad –admitió la otra –Por cierto, ya podías cantarle algo al perro pulgoso que está ahí en la jaula, así nos divertiríamos un poco en el viaje.
Thermo suspiró por enésima vez. Qué largo se le iba a hacer aquel viaje… qué horriblemente largo.
***
Tras acabar de comer, el ama se metió un chicle de nicotina en la boca. Habría regalado sus máquinas a cambio de un pitillo.
-Hay mono ¿eh? –preguntó el inspector con simpatía.
-No lo sabe usted bien, odio volar, me pone nerviosísima, y no poder fumar ya es la puntilla. Lo siento por usted, pero dentro de un rato me doparé para dormir un poco, a ver si se me hace más corto.
-No se preocupe. Ahora cuénteme ¿Qué máquinas lleva para el concurso?
-Pues el certamen manda tres obligatorias: una panificadora, una olla programable y un multirrobot, así que me llevo a Chefo, a G y a Thermo, claro… -el inspector asintió –Y se puede llevar una cuarta libremente, al gusto de cada concursante, así que me llevo a Fry, la freidora que he comprado este año. Estoy bastante contenta con ella.
-¿Y posibilidades de ganar? Son quince participantes ¿no?
El ama se encogió de hombros.
-Sí. Quién sabe… Francia es un serio competidor, por supuesto, pero hay otros países con muy buen nivel también. No pienso en eso, ¿sabe? Bueno, usted ya tiene el plan del viaje y ya sabrá que no va a ser todo cocinar: nos van a llevar a conocer un montón de sitios, a hacer esnórkel, a las pirámides mayas y todo eso. En realidad, lo que más me apetece son unas vacaciones caribeñas en pleno otoño. Además me pilla lejos de casa, va a hacer un año que casi me hacen rebanadas y prefiero estar entretenida muy lejos, no sé si me entiende…
-Veo que aún le dura el trauma, amiga mía –contestó el inspector con simpatía.
-Sí –musitó ella –Creí que no lo contaba, se lo juro. ¿Sabe que nunca he sido capaz de decir nada en casa sobre el asunto? Me da la impresión de que si lo digo a alguien que no lo vivió, yo misma lo reviviré todo desde el principio y me volveré loca… cada vez que paso cerca de ese maldito polígono industrial empiezo a sudar el kilo.
-Bueno –contestó el inspector con su voz suave –Lo dicho, el malo ya está entre rejas y lo estará por mucho tiempo. Y además, teniendo a su gato, que es todo un héroe, está usted más que protegida.
-Ahora, si no le importa, voy a dormir un poco –repuso el ama metiéndose una pastilla en la boca y dándole un sorbo a su vaso de agua.
miércoles, 6 de octubre de 2010
CUATRO MESES CON MI IPAD

lunes, 4 de octubre de 2010
EL ORDEN NATURAL DE LAS COSAS, LA INSOPORTABLE LEVEDAD DEL SER Y LA BAJADA A LOS INFIERNOS
jueves, 30 de septiembre de 2010
TARAMUNDI: LA FUERZA DEL AGUA
Inauguro sección. Hacía ya tiempo que tenía ganas de compartir alguna de mis escapadas de fin de semana. Suelen ser a lugares cercanos con encanto. Y nada mejor que estrenarme con un lugar tan maravilloso como Taramundi, pueblo asturiano lindando con Galicia y cuna del turismo rural, como quien dice.
Precisamente, su categoría de paraíso, como dice su página web, viene dada por lo lejos que está de casi todo. Para acceder desde Asturias sin complicarse la vida, lo mejor es hacerlo por Vegadeo. Para acceder desde Galicia, hay más opciones, siendo la de mejor carretera Ribadeo-Vegadeo, pero se perderán unas cuantas cosas si lo hacen así. También pueden acceder desde Lugo, por la nacional 640, o, como hicimos nosotros, desde Lugo pero pasando por Fonsagrada, por la nacional 530, cambiando después a la AS-27. Tiene muchas cosas para ver, pero no es aconsejable para conductores inexpertos, sobre todo por los bancos de niebla repentinos que se forman.
Si ustedes optan por la ruta desde Fonsagrada, tendrán oportunidad de pasar por el lugar llamado La Garganta, y, si se puede, disfrutar de la espectacular vista: está a treinta kilómetros de Ribadeo y desde allí se ve perfectamente la desembocadura del río Eo en el Cantábrico. ¡Impresionante!
Porque si algo se van a encontrar durante el camino, es un paisaje de alta montaña totalmente virgen, verde, con flora y fauna autóctonas, construcciones respetuosas con el entorno, etc, etc, etc. Eso, y, por lo menos, un centenar de alojamientos rurales con encanto donde desconectar de la vida estresante. Ya mucho antes de llegar a Taramundi nos encontraremos con preciosos pueblos, como Santa Eulalia de Oscos, donde comienza la comarca de Oscos-Eo. Merece la pena hacer una parada.
Una vez que llegamos a Taramundi, nos encontraremos con que toda la zona está dedicada a mostrarnos ingenios que aprovechan la energía generada por el agua. Así, Mazonovo posee un antiguo molino hidráulico para trabajar el hierro; Pardiñas, una fragua y un mazo donde se hacen las mejores navajas y cuchillos de Taramundi; Bres, una casa del agua con unas maquetas increíbles que nos muestran todas las posibilidades del agua como energía ¡y que nos permiten manejar! Y lo mejor: la aldea de Teixois, sólo con dos habitantes, que ha rehabilitado todo su conjunto etnográfico: molino de grano, minicentral hidroeléctrica, batán y fragua. Desde allí, se puede acceder a la preciosa aldea de As Veigas, totalmente rehabilitada y que hoy en día sólo funciona para el turismo rural. Un consejo: no miren hacia abajo, la carretera se las trae.
Para rematarla, además se come de auténtico lujo. La comarca de Oscos tiene sus propios quesos con denominación de origen (con eso a mí ya me llega), además de otras especialidades asturianas como la sidra, la fabada o los patés de carne de caza. Teniendo en cuenta que a aún no finales de septiembre la temperatura nocturna ronda los 6 grados, después de haber pateado a gusto todo el día se impone reponer fuerzas con una buena fabada y un arroz con leche. Nosotros comimos en el restaurante "El mazo", en el hotel "La Rectoral" en Taramundi, una de las mejores fabadas que he tomado en mi vida.
Eso sí, no esperen un clima cálido. No se puede tener todo y, al fin y al cabo, el agua es la fuerza motriz de esta preciosa comarca.
Fotos: Fata Morgana
Banda sonora: To one in paradise, Alan Parsons Project
martes, 14 de septiembre de 2010
ALGO SE MUERE EN EL ALMA
lunes, 13 de septiembre de 2010
SUPERTRAMP, 11-09-2010. COLISEO DE LA CORUÑA****

2. Gone Hollywood (Breakfast in America)
3. Put on your old brown shoes (Famous last words)
4. Ain’t nobody but me (Crisis... what crisis)
5. Breakfast in America (Breakfast in America)
6. Cannonball (Brother where you bound)
7. Poor boy (Crisis... what crisis)
8. From now on (Even in the quietest moments)
9. Give a little bit (Even in the quietest moments)
10. Downstream (Even in the quietest moments)
11. Rudy (Crime of the century)
12. It’s raining again (Famous last words)
13. Another man’s woman (Crisis... what crisis)
14. Take the long way home (Breakfast in America)
15. Bloody well right (Crime of the century)
16. The logical song (Breakfast in America)
17. Goodbye stranger (Breakfast in America)
18. School (Crime of the century)
19. Dreamer (Crime of the century)
20. Crime of the century (Crime of the century)

